top of page

Recursos didácticos

Our Animals 

Aunque algunas especies de termitas son plagas urbanas perjudiciales, responsables de importantes daños en la madera, representan menos del 5% de las más de 2.000 especies de termitas. La mayoría de las termitas desempeñan un valioso papel en los ecosistemas, sobre todo reciclando madera, hierba y hojarasca, aunque esto puede liberar metano, un potente gas de efecto invernadero.

Las termitas se alimentan de lignocelulosa, una sustancia difícil de digerir con bajo contenido en nitrógeno. Para procesarla, las termitas dependen de los microbiomas intestinales que descomponen la lignocelulosa y complementan su dieta con nitrógeno. Entender este proceso de digestión simbiótica es clave para comprender su papel medioambiental y puede ofrecer soluciones para obtener biocombustibles ecológicos a partir de residuos vegetales, al tiempo que ayuda a gestionar las emisiones de gases de efecto invernadero.

Las termitas y su microbioma

Señorita: Anoche vi en la televisión enormes termiteros de 4000 años de antigüedad en Brasil que se podían ver desde satélites. Pero ¿qué hacen las termitas?

El objetivo de los biólogos es comprender los principios fundamentales de la vida: cómo funcionan, crecen, se desarrollan, digieren los alimentos, perciben su entorno, interactúan con otras especies y evolucionan los organismos. En el último siglo, sus métodos han evolucionado y han pasado de observar organismos en la naturaleza a estudiarlos en laboratorios controlados.

Los organismos modelo, como bacterias, hongos, plantas y animales fáciles de cultivar en laboratorio, son fundamentales para la biología moderna. Un organismo modelo clave es el gusano redondo Caenorhabditis elegans, que ha aportado conocimientos sobre procesos biológicos básicos. Estos descubrimientos no sólo benefician a los biólogos, sino también a la sociedad en general, ya que a menudo revelan principios importantes para la medicina y la salud humana.

El nematodo Caenorhabditis elegans como organismo modelo

Mamá: ¿Por qué los científicos estudian animales en el laboratorio?

Las moscardas, con su presencia zumbante e iridiscente, tienen un impacto complejo en los ecosistemas. Sus larvas (gusanos) contribuyen a la descomposición y también pueden estar relacionadas con la transmisión de enfermedades. Las larvas primarias y secundarias son parásitas. Las primarias infestan heridas abiertas en animales de sangre caliente, causando graves daños tisulares, mientras que las secundarias se alimentan de tejido necrótico, impidiendo la cicatrización y causando molestias.

Aunque se asocian a las heridas, las larvas de moscardón también tienen usos médicos. Cuando se crían en condiciones estériles, se emplean en la terapia con gusanos para limpiar heridas devorando tejido muerto y ayudando a la cicatrización. Además, las moscardas desempeñan un papel clave en las investigaciones forenses, ya que ayudan a calcular la hora de la muerte.

Acompáñenos a explorar el fascinante mundo de las moscardas, sus ciclos vitales únicos y su impacto en la salud, la agricultura y la ciencia forense. Comprender estas especies parasitarias es esencial para desarrollar soluciones sostenibles que mitiguen sus efectos.

Moscas azules

¿Has notado alguna vez cómo parecen encontrar las fuentes de alimento más inesperadas y, por cierto, desagradables? Es como si tuvieran un sexto sentido para las cosas más raras y con más olor.

Las aves albergan una gran variedad de microbios en su cuerpo (plumaje, patas, picos, ojos) y en su aparato digestivo. La mayoría de estos microbios son inofensivos y forman relaciones mutuamente beneficiosas, intercambiando materia orgánica y moléculas. Mientras que los microbios ayudan a las aves en las tareas del ecosistema, éstas se benefician de una alimentación y dispersión más fáciles.

Esta lección explora fascinantes ejemplos de interacciones entre aves y microbios. Examinaremos cómo los microbios ayudan a los pájaros carpinteros a construir sus nidos y cómo algunas especies de aves utilizan las plumas de los nidos para combatir los patógenos. Además, hablaremos de cómo los microbios influyen en el color del plumaje y del papel de los microbios de las glándulas del preen en la emisión de olores para la comunicación y la selección de pareja. Por último, destacaremos la importancia de los microbios gastrointestinales en el mantenimiento de la salud de las aves.

Ilustración de Jose Arce Gómez

Las aves y su microbioma

Maisy: ¿Cómo es posible que los pájaros carpinteros creen nidos en madera maciza?

¿Cuáles son las razones de las muertes masivas recurrentes de delfines y focas? ¿Son sostenibles las intervenciones médicas para los mamíferos acuáticos? ¿Cómo podemos ayudar a evitar brotes de infecciones similares a las de las plagas en estas especies?

Fotografía de Noah Munivez en Pexels

Infecciones que ponen en peligro a los animales acuáticos salvajes

¿Cómo podemos ayudar a todos estos delfines varados?

Los bovinos, ovinos y caprinos son mamíferos herbívoros con una estructura intestinal especializada que les permite alimentarse de alimentos fibrosos como la hierba. Su primer estómago, el rumen, alberga microorganismos que descomponen la fibra vegetal en ácidos grasos volátiles (AGV), que se absorben para producir energía y crecimiento. Estos microorganismos también aportan nutrientes adicionales a su paso por el tubo digestivo.

Los rumiantes pueden convertir los pastos y los terrenos accidentados en alimentos comestibles para el hombre, produciendo carne y productos lácteos que son alimentos básicos en muchas culturas. Sin embargo, esto conlleva problemas medioambientales y sanitarios. El proceso de fermentación ruminal produce metano, un potente gas de efecto invernadero, y la orina y las heces de los rumiantes, ricas en nitrógeno, pueden contaminar la tierra y los cursos de agua. Además, el consumo excesivo de carne y leche de rumiantes puede plantear riesgos para la salud.

Microbios del rumen

Granjero Jones: ¿Sabes por qué las vacas pueden comer hierba y nosotros no?

bottom of page