
Pátina microbiana

Rachel Armstrong
Rachel: ¿Qué es esa mancha negra en la estatua?
¿Ha notado cómo las estatuas o los edificios se oscurecen con el tiempo? Esas marcas pueden ser obra de microbios (bacterias, hongos y algas) que se asientan en la piedra, la madera o incluso el plástico, creando lo que se conoce como pátina microbiana. Estos artistas invisibles manchan, agrietan y colorean las superficies, a veces protegiéndolas y otras provocando su deterioro. En lugares húmedos y salinos como Venecia, su crecimiento puede volver las paredes verdes o negras, mientras que en otros lugares, los conservadores incluso utilizan microbios «buenos» para limpiar obras de arte antiguas.
Los artistas también han adoptado estos pigmentos vivos y colaboran con las bacterias para crear bioarte. Cada superficie artística —lienzo, arcilla, vidrio o metal— se convierte en un nuevo ecosistema donde los microbios prosperan silenciosamente. Así, el arte y la naturaleza se entrelazan: los seres humanos dan forma a los materiales y los microbios, a su vez, los remodelan. El resultado es una obra maestra compartida, escrita con óxido, biopelícula y el tiempo mismo.
