
Usos de los hongos: ¡Nuestro mundo se está enmoheciendo!
Han A. B. Wösten

Señorita: Me encantan las setas en la comida (sobre todo en la pasta), pero acabo de oír hablar de vestidos hechos de setas: ¿es posible?
Las setas suelen asociarse con enfermedades, descomposición y muerte, como reflejan nombres como «trompeta de la muerte», «boletus bruja» y «huevo del diablo». Aunque algunos hongos dañan los árboles —como una seta melosa de Oregón que mató a muchos árboles y es el organismo más grande de la Tierra—, las setas son solo las estructuras reproductivas de los hongos. La mayor parte de un hongo crece de forma invisible como una red de hifas filiformes llamadas micelio, que colonizan el suelo, la madera o los organismos vivos y producen hongos para liberar esporas cuando las condiciones son adecuadas. El micelio del hongo de la miel de Oregón abarca 10 km² y ha crecido durante miles de años.
Las setas también pueden ser perjudiciales para los seres humanos; alrededor del 1-2 % son venenosas. Por ejemplo, se dice que el emperador romano Claudio fue envenenado en el año 54 d. C. con una seta mortal, la amanita viscosa, escondida en un plato de setas de César. Sin embargo, las setas no solo son perjudiciales, sino que también son muy beneficiosas. Proporcionan alimento, favorecen la salud y ofrecen alternativas sostenibles a materiales como el plástico, lo que las hace fundamentales para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
